El Objetivo de TENA

Nuestro objetivo está claramente definido: mejorar la vida de las personas que viven o trabajan con la incontinencia urinaria en todo el mundo.

Lo que importa son las personas…

Además de ser sorprendentemente común, la incontinencia puede aparecer con independencia de la edad o del estado de salud, afectando con frecuencia a personas que están en la flor de la vida.

Aunque en sí misma no supone un problema médico especialmente grave, el tabú que se percibe en torno a ella puede minar la confianza social de las personas afectadas. El temor constante a que se produzca un escape de orina puede hacer que muchas actividades habituales, como comprar, hacer deporte o incluso coger en brazos a un hijo, supongan todo un reto.

Si la incontinencia no se trata de forma adecuada, es posible que las personas que la sufren se vuelvan retraídas, negándose incluso las cosas de la vida que más disfrutan.

TENA está convencida de que la incontinencia no debe impedir a la gente llevar una vida feliz y plena. Esta máxima rige toda nuestra actividad: ya sea en lo que respecta al desarrollo de productos y servicios, al fomento de prácticas recomendadas para el cuidado de la incontinencia en los centros sanitarios o al aumento de la concienciación pública.

... y ofrecer una atención mejorada

Debido al envejecimiento de la sociedad, resulta inevitable el aumento de las personas que necesitan asistencia práctica, ya sea por parte de sus familiares en su domicilio o de profesionales en una residencia. Para los familiares, el cuidado de la incontinencia puede suponer una pesada carga física, emocional y económica. Queremos ofrecer todo el asesoramiento, el apoyo y los productos que podamos para ayudarles a garantizar la mejor calidad de vida para ellos y para las personas a las que cuidan.

Gracias a la experiencia de TENA en su colaboración con profesionales sanitarios, seguimos desarrollando productos, servicios y materiales educativos más efectivos que permiten ofrecer la mejor atención a los pacientes y que, al mismo tiempo, tienen en cuenta las necesidades de los cuidadores y el impacto económico de la asistencia sanitaria a gran escala.